La desigualdad en Bolivia es medida normalmente a través del ingreso pero la construcción de un índice socio- económico (ISE) utilizando los cuatro censos disponibles 1976, 1992, 2001 y 2012 logra analizar la desigualdad a largo plazo en un enfoque multidimensional. La aplicación de un enfoque de descomposición inter-temporal permite identificar la relevancia de variables como etnia y género (del Jefe de hogar) tanto en la estructura como en la composición del cambio del ISE en el tiempo a nivel de cuantiles.
Esta investigación busca dar un panorama a largo plazo sobre el comportamiento de la desigualdad horizontal en Bolivia, medida a través de un índice socio-económico (ISE) utilizando los cuatro censos disponibles 1976, 1992, 2001 y 2012. Si bien la descomposición de la varianza (Fortin, Lemieux, & Firpo, 2011) ha sido aplicada sobre todo a los ingresos, es importante poder descifrar la evolución de la desigualdad a largo plazo medida por un proxy del bienestar, identificando el rol de variables como género y etnicidad.
La descomposición aplicada al Gini muestra aumento en la desigualdad entre hogares a cargo de mujeres hasta 2001 aunque la educación y lugar de residencia explican más los cambios en la desigualdad.
Las variables con mayor impacto sobre el efecto composición del ISE son etnia, lugar de residencia (rural o urbana) e informalidad. Es remarcable confirmar que la urbanización ha ido quitando importancia a estas variables (etnia y rural), mientras que, en los estratos superiores de la distribución, la educación y la experiencia provocan caídas en el efecto estructura compensadas por aumentos en el efecto composición.